Los
príncipes, amantes del séptimo arte, disfrutaron este fin de semana de una
película de estreno en uno de los cines de Madrid.
Como
una pareja más, llegaron dando un paseo a la sala y no dudaron en pararse a
hablar con otros asistentes. Hicieron la cola para comprar las entradas y accedieron a sus asientos como cualquier matrimonio que quiere salir a despejarse un sábado por la noche.
En
esta ocasión, a diferencia de las anteriores, no acudieron a una sesión de una
hora poco corriente, y compartieron sala
con un gran número de personas. No
hubo pitos, ni abucheos. Según cuenta uno de los asistentes, Felipe y Letizia
se mostraron cercanos y agradables con todas las personas que curiosas se les
acercaron.
(Imágenes de Pure People)
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